Módulo de sistema de gestión de edificios PLC SR20

El PLC SR20 es un controlador de automatización industrial de última generación diseñado para una integración perfecta en los procesos de fabricación. Con 12 entradas y 8 salidas, ofrece la flexibilidad y el control necesarios para gestionar varias máquinas y sistemas de forma eficiente.

Ventajas:

• Control de alto rendimiento:Admite múltiples tareas simultáneamente para optimizar la producción.
• Salida de relé versátil:Gestiona directamente los dispositivos de alto voltaje, simplificando la configuración y el mantenimiento.
• Opciones de fuente de alimentación flexibles:Compatible con sistemas de 220 V CA y 110 CC, lo que permite una fácil integración en las configuraciones existentes.
• Diseño compacto:Factor de forma que ahorra espacio para una fácil instalación en paneles de control.

Ventajas:

Considere una línea de ensamblaje automotriz donde el PLC SR20 se emplea para administrar brazos robóticos, cintas transportadoras y sistemas de control de calidad. Con su configuración de 12 entradas y 8 salidas, el PLC puede monitorear de manera efectiva los sensores que detectan la presencia de componentes en la línea de montaje. También puede controlar actuadores que gestionan el movimiento de las piezas, asegurando que cada pieza se ensamble en el orden correcto.

Por ejemplo, el PLC se puede programar para detectar cuando la carrocería de un automóvil llega a un punto específico de la cinta transportadora. Una vez detectado, el PLC puede activar el brazo robótico para realizar soldaduras o pinturas, reduciendo significativamente el riesgo de error humano y aumentando la velocidad de producción. Las salidas de relé permiten el control directo de maquinaria pesada, lo cual es esencial para tareas que requieren alto voltaje, lo que garantiza un funcionamiento seguro y confiable.

Además, la flexibilidad del PLC SR20 permite integrarlo en los sistemas existentes sin necesidad de grandes revisiones. Admite opciones de fuente de alimentación de 220 V CA y 110 CC, lo que lo hace adaptable a varias configuraciones. Esta adaptabilidad significa que las fábricas pueden actualizar sus sistemas de automatización sin incurrir en costos excesivos, lo que facilita una transición más suave a la tecnología avanzada.